¿Qué sensaciones te deja esta nueva edición del Summit en Medellín y qué balance haces del evento?
Este Summit marca la edición número 17 y vuelve a Colombia, específicamente a Medellín, por segunda vez. Todo lo que diseñamos parte de dos ejes: lo que necesitan nuestros miembros para elevar su competitividad en la captación de congresos, y lo que puede aportar nuestro anfitrión, en este caso Medellín. Por eso, los temas se centraron en ciencia, innovación y tecnología, con sedes como la Universidad Pontificia Bolivariana, Ruta N y el Parque Explora. Queremos enviar un mensaje claro sobre la relevancia de este nicho dentro de la industria de reuniones, no solo para adoptar tecnología, sino también para atraer eventos asociados a ella. Medellín representa esa plataforma para que América Latina lidere estas conversaciones.
Mencionaste que este Summit marca un “antes y un después”. ¿A qué te refieres?
Este evento es único dentro de ICCA, pues el modelo solo existe en América Latina y a partir de su éxito comenzará a replicarse en otras regiones como Medio Oriente, Asia Pacífico, Norteamérica y África. El impacto inmediato es el posicionamiento de nuestra región como referente de innovación en la industria, además de generar más negocios, visibilidad y proyección internacional.
¿Cómo evalúas la actualidad del turismo de reuniones en América Latina y el Caribe?
Los datos más recientes muestran un crecimiento en el mercado asociativo. De hecho, entre 2023 y 2024, América Latina junto a Medio Oriente fueron las únicas regiones que incrementaron el número de eventos, lo cual refleja un dinamismo positivo. Consideramos que aún hay mucho potencial por desarrollar. América Latina es hoy una incubadora y aceleradora de ideas que fomentan nuevos negocios y congresos. Sin embargo, para crecer más necesitamos que los destinos refuercen su inversión en la industria, sumen actores como agencias de inversión, universidades y centros de innovación, y fortalezcan el acceso a datos que sustenten esa narrativa.
¿Qué países ves con mayores posibilidades de desarrollo en este sector?
Toda la región muestra avances, pero algunos casos sobresalen. Brasil está redoblando esfuerzos y, por primera vez, el Congreso de Unidestinos se internacionalizó con apoyo de ICCA. Colombia destaca como multidestino, con ciudades muy activas y buena infraestructura, lo que se refleja en la organización de eventos como el de Bogotá y este en Medellín. Panamá también es clave, ya que será sede del Congreso Mundial de ICCA en 2026. Costa Rica, con su apuesta por innovación y sostenibilidad, mantiene un rol muy activo. Además, hay que destacar el involucramiento de empresas y cadenas como Marriott CALA, que están invirtiendo con fuerza en esta industria.
El concepto de legado se ha vuelto central en la industria de reuniones. ¿Cómo lo trabajan desde ICCA?
Más allá de ser un término de moda, el legado es una prioridad real. Hoy los eventos se evalúan por su capacidad de dejar un impacto positivo y duradero en las comunidades anfitrionas. En América Latina todos los destinos cuentan con programas de legado, en mayor o menor grado de desarrollo, y las asociaciones internacionales ya lo consideran un factor determinante para elegir sedes y proveedores. Desde ICCA impulsamos este enfoque y lo vinculamos con sostenibilidad y propósito. Además, como miembros activos de ONU Turismo, trabajamos para visibilizar el aporte del turismo de reuniones en temas de desarrollo, innovación e impacto social.