Ecuador potencia su diversidad para consolidarse como destino líder en eventos internacionales

¿Cuáles son los objetivos de Ecuador en esta edición de FIEXPO?

Estamos muy contentos de estar nuevamente presentes con un stand que representa los "cuatro mundos" del Ecuador. Contamos con una delegación importante de destinos como Guayaquil, Quito, Manta y otras ciudades clave. Venimos con grandes expectativas: queremos captar más eventos para el país, aprovechando nuestra infraestructura de primer nivel; como centros de convenciones, iglesias y museos, y la calidad del servicio que ofrecemos los ecuatorianos.

¿Qué relevancia tiene el segmento MICE para el desarrollo turístico del país?

Este segmento es prioritario para nosotros. Lo hemos integrado como parte de nuestros macroproductos turísticos por su capacidad de dinamizar la economía local y fortalecer toda una cadena de valor. Contribuye significativamente a la generación de empleo y a la reactivación económica, algo que necesitamos con urgencia.

¿Qué ventajas ofrece Ecuador a los organizadores de eventos?

Nuestra ubicación geográfica es privilegiada: estamos en el centro del mundo. A poca distancia se puede acceder a una diversidad impresionante —nevados, playas, selva amazónica y, por supuesto, las Islas Galápagos, nuestro mayor tesoro, a solo una hora de vuelo. Además, la conectividad ha mejorado notablemente y estamos invirtiendo en promocionar aún más nuestro país para atraer inversión y fortalecer el desarrollo productivo.

¿Esta presencia en FIEXPO forma parte de una estrategia más amplia de impulso al turismo?

Sí, totalmente. Es el resultado de un trabajo articulado entre el gobierno central, los gobiernos locales, el sector privado y la academia. Hoteleros, operadores turísticos, asociaciones y cámaras están alineados con una visión común. También contamos con el respaldo del conocimiento académico para enriquecer la oferta con cultura y gastronomía.

¿Cómo están integrando la identidad ecuatoriana en esta estrategia?

Es fundamental. Estamos trabajando en una marca país que represente a todos los ecuatorianos. Queremos que sea una marca apolítica, que no se limite al turismo, sino que también abarque inversiones y exportaciones. El objetivo es generar un fuerte sentido de pertenencia bajo el concepto de que Ecuador brilla auténticamente.